Frente a un mercado que se vuelve más competitivo cada día, la startup española NAW (Natural Active Wear) se presenta como una propuesta innovadora que busca cambiar nuestra percepción del calzado deportivo infantil. Su enfoque integra salud, diseño, innovación técnica y sostenibilidad, con el objetivo de no solo vestir, sino también cuidar el desarrollo natural de los más pequeños.
Fundamentos de la marca
NAW fue fundada por Silvia Echeverría con una misión bien definida desde el inicio: ofrecer zapatillas deportivas que permitan a los niños “pisar naturalmente”, sin forzar la forma del pie ni afectar su postura. Para lograr esto, han trabajado en colaboración con podólogos y expertos en biomecánica, asegurando que cada diseño sea no solo atractivo, sino también funcional.Una de las características que distingue a NAW es su compromiso con la economía circular y la producción responsable. Por ejemplo:
Utilizan suelas homogéneas (hechas de un solo material) para facilitar el reciclaje al final de su vida útil. Emplean tejidos ligeros, con o sin cordones (o con velcro), para fomentar la autonomía de los niños y la comodidad en su uso diario.
Están desarrollando materiales técnicos que combinan ligereza, adherencia y flexibilidad, adaptándose tanto a días de juego activo como a la vida cotidiana.
Estrategia de posicionamiento de mercado
Para destacarse y convertirse en un referente, NAW ha adoptado ciertas tácticas de marketing estratégicas: Segmentación clara: se enfocan en el segmento infantil (niños de 4 a 10 años) con productos diseñados específicamente para sus necesidades biomecánicas. Diseño fundamentado: cada producto se desarrolla teniendo en cuenta la anatomía del pie y la pisada natural, evitando caídas pronunciadas o formas que puedan deformar o comprimir.Enfoque local con visión global: aunque la marca es española, ya están pensando en exportar y fabrican cerca para reducir la huella ecológica y los costos logísticos. Su producción, principalmente en Europa, respalda esta iniciativa.
Efectos en la fidelización y percepción de valor
Gracias a esta combinación de diseño, salud y responsabilidad, NAW está logrando captar a consumidores que valoran estos aspectos, lo cual se traduce en: Mayor disposición a pagar por productos que consideran “seguros” para sus hijos, con características de salud y sostenibilidad. Incremento en la lealtad: los padres valoran las marcas que alinean calidad, ética y diseño, lo que favorece la repetición de compra y el boca a boca. Distinción frente a competidores que prioritizan tendencias sobre ergonomía: NAW se sitúa como una alternativa más técnica al calzado deportivo infantil masivo, que suele ser menos especializado.
Retos a superar
A pesar de sus claras fortalezas, NAW también enfrenta algunos desafíos: Mantener los costos accesibles mientras se mantienen altos estándares técnicos y de calidad en los materiales. Escalar la producción sin perder trazabilidad ni calidad, especialmente si la demanda aumenta rápidamente. Lograr penetración en mercados internacionales con normativas y requisitos diferentes, lo que les obliga a adaptar materiales, tallas y estándares.
Conclusión
NAW es un claro ejemplo de cómo se puede hacer marketing con propósito: al combinar salud infantil, diseño funcional y responsabilidad ambiental, no solo venden calzado, sino también confianza. En un entorno donde los consumidores están cada vez más informados, esa promesa de valor –si se cumple– es lo que puede convertir a una marca emergente en un referente.