En marketing ya no basta con hacer campañas atractivas en internet o activaciones llamativas en el mundo real. Hoy las marcas buscan crear experiencias phygital, un concepto que mezcla lo presencial con lo digital para lograr interacciones memorables y más cercanas al consumidor.
¿Qué significa “phygital”?
Es la integración de lo que pasa en persona con lo que sucede en pantalla, diseñada para funcionar en conjunto. No es elegir entre lo online o lo offline, sino usar lo mejor de cada uno para generar experiencias más completas, divertidas y personalizadas.
¿Cómo funcionan las experiencias phygital?
- Realidad aumentada (AR): Escanear un póster en la calle y ver cómo cobra vida en tu celular.
- Códigos QR dinámicos: Activaciones en eventos que al escanear llevan a descuentos, juegos interactivos o contenido exclusivo.
- Pantallas interactivas: Tiendas físicas con espejos digitales donde puedes “probar” diferentes looks sin cambiarte de ropa.
- Gamificación en vivo: Dinámicas en conciertos, expos o ferias donde el público participa a través de apps o redes en tiempo real.
¿Por qué son tan efectivas?
- Mayor engagement: El consumidor no solo ve un anuncio, lo vive.
- Recuerdo más fuerte: Al involucrar varios sentidos, la experiencia se graba con más facilidad en la memoria.
- Fácil de compartir: estas dinámicas invitan a que las personas las capten con su celular y las suban a sus redes, lo que multiplica el alcance.
- Datos valiosos: Cada interacción digital aporta información útil para conocer mejor a los clientes.
Las experiencias phygital conectan lo presencial con lo online. Al unir ambos planos, las marcas dejan de solo vender para provocar momentos memorables que la gente recuerda y comparte. En un entorno saturado de anuncios, la clave está en sorprender y generar conexión real a través de la innovación.